NOTAS PRELIMINARES:
No sólo los gatos bengalíes juegan a devolver la pelota, sino también muchos otros gatos de razas activas, o sin raza definida, más bien de pelo corto.
La edad ayuda, siendo más fácil iniciar a un gatito en este juego a los tres o cuatro meses de edad que cuando ya es adulto.
Hay gatos que apenas necesitan esfuerzo para iniciarse en este juego, otros necesitarán más empeño y perseverancia, y no todos los gatos se prestarán a este juego, y no por ello son ni mejores ni peores.
El mejor gato es el que ronronea
POR RESPETO: Un ratón expresa mejor la propia épica e idiosincrasia del gato. Sería ridículo hacer que un gato devolviera un palo o un hueso. Un "Bengal" es un gato, sólo gato, y un gato no es un perro, y compararlos suele dar como resultado ignorar la superioridad natural del Gato (véase: H. Weir. Our Cats and all about them).
POR SEGURIDAD: Es difícil encontrar pelotas "mordibles" para el tamaño de la mandíbula de un gato y que sea adecuada para su dentada; además, las pelotas suelen tener un recorrido más impredecible, por lo que pueden ocasionar mayores lesiones y accidentes. Los ratones son formidables.
POR JUGABILIDAD: Si compramos ratones que suenen al moverlos, son perfectos, porque estimularán más al gato; además, que sean más fáciles de atrapar le dará una mayor fluidez al juego, por lo que podremos disfrutar más.
POR ECONOMÍA: Los ratones son más baratos que las pelotas, y siendo un juguete que se llevan a la boca, es saludable reponerlos con frecuencia.
El juguete favorito de su gato es usted
EMPATÍA: No todo gato que empatiza con su dueño le devuelve el ratón al lanzárselo, pero sí que todo gato que realiza este gesto empatiza con su dueño. La clave de la empatía no sólo está en pasar tiempo con el gato, sino en pasar "tiempo de calidad", en el que le prestemos atención y nos relacionemos de tú a tú con él.
"SITIO FIJO": Es bueno escoger un lugar concreto de la casa que pueda tener un buen "tiro de ratón" (con un "pasillo" seguro de varios metros), y dejar ahí siempre durante varios días un ratón, para que el gatito identifique el lugar desde el que se le va a lanzar el ratón con el lugar en el que "debe" estar el ratón. Si el gato ya deja habitualmente el ratón en otro lugar distinto cuando termina de jugar, ayudará que escojamos este lugar si es posible.
"JUEGO EN PAREJA": Es muy difícil que el juego salga bien si hay varios gatos, sobre todos si son igualmente activos, ya que su prioridad será proteger su ratón y no ponerle fácil a otros la tarea de quitárselo, mucho menos soltarlo por sí mismo.
El gato bengalí juega a devolver la pelota como lo hacen otros gatos, no como los perros
Aladdin, uno de los gatos que aparecen en el vídeo devolviendo el ratón. El ratón que aparece en la foto es ideal para este juego.
PONERNOS EN EL "SITIO FIJO" DEL RATÓN: Hacemos sonar el ratón, llamamos la atención de gato, lo acariciamos, y lo lanzamos ante su vista donde pueda verlo.
SI NO DEVUELVE EL RATÓN: Acudimos hasta donde está el gato jugando con su ratón, se lo quitamos con cuidado, y volvemos al punto de salida. Repetimos el proceso. Algunas veces el éxito llega tras doscientos lanzamientos y varios meses de perseverancia, otras veces es casi inmediato.
SI RECOGE EL RATÓN Y VA A OTRO LUGAR: Quizá nos esté indicando que ese es el buen punto de salida para el juego.
SI NOS DEVUELVE EL RATÓN: Algunos gatos se conforman con acercar el ratón a un paso de donde estamos, esto ya sería un éxito, por lo que si nos lo pone en la misma mano sería conveniente reforzárselo con unas buenas caricias antes de volver a realizar un nuevo lanzamiento.
INVITACIONES: Si el gato por sí mismo ocasionalmente pone un ratón en el punto de salida, nos está pidiendo que juguemos con él. No rompamos su corazón y accedamos a su invitación, ya que no hacerlo podría llevarle a perder su confianza.
Zeusito y Aladdin, dos gatitos bengalíes de Marbella Felina
Zeusito, jugando precisamente a devolver el ratón.
EL "EGOÍSMO" DEL GATO: El gato quiere fluidez en el juego para jugar y cazar más, por lo que si descubre que trayéndonos el ratón el proceso se acelera, no esperará a que nosotros vayamos a por el ratón, y él mismo nos lo traerá.
LA GENEROSIDAD DEL GATO: Que un gato te traiga un ratón significa que te está entregando un regalo. Te regala la presa que ha cazado, y debes agradecérselo mostrándole afecto con unas buenas caricias, especialmente si te pone el ratón en la misma mano, cosa que hay que facilitárselo poniéndola a su altura.
GUARDANDO SIEMPRE LAS DEBIDAS PRECAUCIONES:
No lancemos el ratón a lugares peligrosos.
No le quitemos bruscamente a un gato su ratón en el proceso del aprendizaje, teniendo en cuenta este criterio: "Nunca quitarle a un gato su presa, sino quitarle a la presa el gato", salvo que queramos deliberadamente salir arañados.